Como ya sabrás, el feedback constructivo no consiste en señalar los defectos o las áreas de mejora de un empleado y listo. Se trata, más bien, de ofrecer observaciones que resalten tanto las fortalezas como las oportunidades de crecimiento. Reconocer el potencial en los errores y las posibilidades de aprendizaje en los logros.
La mayoría de managers lo está pasando mal. Las últimas tendencias en gestión de equipos (en un intento por que den un paso al frente y lideren determinación, pasión y visión), les han instado a que no sean sólo managers. Ahora también se espera que sean estratégicos, que definan una misión clara, que marquen el tono y el ritmo, y que además, sean auténticos y accesibles.
Pasa en todos los trabajos: siempre hay alguien que irradia una energía especial. Ya sean compañeros, jefes o colegas, tienen la capacidad de inspirarte y de recargarte de energía cuando estás cerca de ellos. Estas personas poseen un encanto innato. Su mera presencia logra captar tu atención y cuando entablan conversación, sientes que están totalmente conectados contigo. Su influencia puede transformar tu estado de ánimo en cuestión de instantes.
¿Qué diferencia a un líder promedio de uno excepcional? Ah, la gran pregunta… En mi experiencia, la respuesta radica en la conciencia y el apoyo que brinda a su equipo. En un mundo donde la rapidez y la competitividad son la tónica habitual, los líderes conscientes destacan por su capacidad de conectar con sus equipos a un nivel mucho más profundo. Estos líderes no solo guían, sino que también inspiran, motivan y empoderan a quienes los rodean.
¿Te sientes abrumado por la cantidad de tareas que tienes que realizar? ¿Te cuesta concentrarte en lo que realmente importa? Si es así, es posible que no estés distinguiendo bien entre lo urgente y lo importante. En este post te ayudo a comprender la diferencia entre estas dos categorías y te muestro ejemplos para que puedas identificarlas y gestionar tu tiempo de forma más eficaz para alcanzar tus objetivos.
Hoy hace una semana que fue el Día de la Mujer, y he pensado en traeros un post de lo más especial sobre un tema que afecta a muchísimas —pero muchísimas — mujeres; sean mánagers o no. Me refiero a la dificultad que nosotras, más que ellos, tenemos para decir «no» sin sentir remordimientos.
Liderar no es solo dar órdenes o gestionar tareas. No. Un líder consciente y efectivo es aquel que es capaz de crear un entorno de trabajo positivo y productivo donde los miembros del equipo se sienten motivados, valorados y comprometidos. Un buen líder es la pieza clave que impulsa el éxito de cualquier empresa, equipo o proyecto.
Algo que todos los líderes conscientes tienen claro es que, sin sus equipos, son como un barco sin velas: no van a ninguna parte. Y si le preguntamos a cualquier líder qué tipo de equipo anhela, la respuesta siempre será la misma: un equipo de alto rendimiento.
Si tienes la sensación de que no hay suficientes horas en el día, si tu lista de tareas crece constantemente y se hace kilométrica, si siempre tienes prisa y te cuesta seguir el ritmo de las exigencias laborales, este post es para ti.
